“¿Qué valor están dando las administraciones al sacrificio de tantos buzos españoles?
“¿Qué valor están dando las administraciones al sacrificio de tantos buzos españoles que están poniendo en riesgo su salud a diario?”
Falta poco más de un año para alcanzar mi jubilación tras haber dedicado toda una vida al buceo industrial. Mis comienzos en esta industria se remontan a mi época de chaval, cuando mi cuñado Enrique Bustara me dio la oportunidad de ayudarle en su empresa y hacer mis primeros buceos allá por la década de 1980.
Mucho ha cambiado el sector y las condiciones de trabajo. Aquellos turnos de 8 horas en el agua con equipos muy diferentes a los que hoy se usan, hacían que esta profesión fuese muy dura. Afortunadamente, todo esto cambió gracias a las mejoras en la normativa, pero en nuestras vidas y en nuestros cuerpos queda el desgaste de cientos de horas de frío y trabajo pesado en el fondo. Muchos de estos trabajos, si no todos, fueron labores que han ayudado a que España goce de mejores infraestructuras públicas que desde hace décadas vienen beneficiando a los ciudadanos de este país y a quienes nos visitan.
Pero ¿qué valor están dando las administraciones al sacrificio de tantos buzos españoles que han enfrentado tantos proyectos, poniendo en riesgo su salud?
A punto de retirarme, puedo decir que la aprobación del coeficiente reductor para los buzos profesionales solo ha logrado anticipar muy pocos meses mi jubilación. Y es que considerar que un índice del 0,15 y otorgarle carácter retroactivo desde 2017 es sencillamente ridículo.
“Creo que los buzos comerciales merecen la misma consideración que otros trabajadores que están dentro del régimen del mar y se les debe aplicar el máximo coeficiente reductor posible. No entiendo que tengamos que esperar a los 65 años para jubilarnos”
Sin entrar a valorar la labor de los sindicatos que han hecho posible la medida, creo que los buzos comerciales merecen la misma consideración que otros trabajadores que están dentro del régimen del mar y se les debe aplicar el máximo coeficiente reductor posible. No tiene sentido que un amarrador de puerto pueda jubilarse con unos 55 años aproximadamente y nosotros tengamos que esperar hasta los 65 años.
En mi caso, puedo decir que mis condiciones físicas son buenas y sigo entrando al agua en la mayoría de los proyectos en los que sigo trabajando. Reparaciones y mantenimiento de puertos, balizas de señalización y tuberías, que me mantienen en activo. Pero no es el caso de otros muchos compañeros de profesión, a los que las horas de agua han mermado sus capacidades.
Por eso entiendo que sería justo que, por un lado, los coeficientes reductores alcanzaran el máximo, como decía anteriormente y que se pudiera considerar la ampliación del índice a toda la carrera profesional. Al menos, creo que esto último debería ser así para un grupo de buzos que hayan alcanzado cierta edad dentro de la profesión, independientemente del coeficiente actualmente aplicado. Si no es así, el coeficiente, repito, es ridículo y no tiene repercusión alguna.
Con esta situación, a muchos buzos veteranos en la profesión les queda la opción de seguir vinculados a las empresas aportando su experiencia. Esto es algo que se debiera considerar seriamente, ya que sería algo beneficioso para los buzos más jóvenes y para las compañías de buceo.
Aportaría mayor eficiencia y seguridad en las operaciones, que redundaría también en su rentabilidad, además de poder ser un pilar interesante para la formación de los nuevos buzos. Un buzo con experiencia sería un perfecto asesor para las empresas.
Por supuesto, en este sentido, también hay que hacer una valoración de la subida salarial, que a pesar de la actualización, pienso que siguen estando estancados en muchos casos. Queda mucho por mejorar en nuestra profesión.
En lo que a mi futuro próximo se refiere, quizás pueda mantenerme en el sector algún corto periodo de tiempo con labores de este tipo, pero es una opción que queda en un segundo plano ante la posibilidad de finalizar definitivamente mi carrera a los 65 años, después de toda una vida en activo. De cualquier manera, pienso que de una manera u otra siempre estaré ligado al mundo del buceo en mi nueva etapa.