Umberto Giorgini es experto en seguros de buceo y responsable de membresía de DAN Europe – Divers Alert Network Europe. El pasado 9 de noviembre Giorgini participó en el programa radiofónico Al Otro Lado del Espejo (AOLDE), dirigido por Rol Freeman, donde expuso sus conocimientos acerca de los seguros en relación a las limpiezas de fondos marinos.
SubaQuatica Magazine inició hace varias semanas el debate sobre las limpiezas de fondos marinos y las consecuencias en el sector del buceo profesional. La visión de los buceadores deportivos en las últimas semanas, están arrojando más luz sobre el correcto desarrollo de estás iniciativas medioambientales
“Sería mucho más sensato establecer unas reglas específicas para las limpiezas de fondos marinos, que establecieran las limitaciones”
Umberto Giorgini – Dan Europe
Antes de valorar las coberturas que los seguros pueden ofrecer a los participantes de una campaña de limpieza de fondos, hay que analizar el marco legal en el que se desarrollan, pues según las regiones, se pueden interpretar como actividades de buceo recreativo o, en otras, de buceo técnico y, por tanto, aplicarse una normativa u otra.
A su vez, el organizador ha de contar con los permisos y autorizaciones de las autoridades competentes. Esto es importante porque los buceadores recreativos, ni siquiera los que tienen titulación ‘Open Water’, están entrenados para extraer objetos del fondo, ya que no es la misión de esos cursos. Estos trabajos de mantenimiento están previstos para empresas de buceo comercial totalmente capacitadas y que cuentan con los equipos necesarios.
La normativa vigente prohíbe a los buceadores deportivos realizar inmersiones en los puertos. Pero la mayoría de las limpiezas se hacen en puertos y marinas y, además, se hacen con la participación de buceadores recreativos. Es una contradicción. Sería mucho más sensato establecer unas reglas específicas para este tipo de actividades, que regularan los límites según las titulaciones, tanto de tareas como de profundidades. Pero esto no es una tarea sencilla. Es mucho más fácil organizar estas jornadas de limpieza y concienciación en zonas habituales de buceo deportivo o recreativo que estén mal conservadas, algo, por desgracia, muy habitual.
Las empresas de buceo comercial no sólo están defendiendo su área de trabajo, sino que sostienen algo de sentido común: que este tipo de actividades deben realizarse con unos protocolos de seguridad ycon unos equipos para los que el buceo recreativo no está preparado. Hay poca visibilidad, posibilidad de aguas contaminadas, etc.
En cualquier caso, y hablo como parte de DAN Europe, los seguros cubren cualquier tipo de incidencia que pueda producirse en estas actividades. En caso de accidente subacuático, quedan cubiertas las emergencias de buceo, ya sea el tratamiento en cámara hiperbárica o los gastos ocasionados por daños físicos al buceador.
