“El reconocimiento de IMCA abre grandes posibilidades laborales a nivel internacional para nuestros alumnos”

En el ámbito del buceo comercial y profesional, la calidad de la formación es un pilar fundamental para garantizar no solo la seguridad y eficacia de las operaciones subacuáticas, sino también para asegurar una inserción exitosa en el mercado laboral.
Unos rigurosos estándares y criterios de calidad educativa, que abarquen desde cuestiones técnicas y la práctica del currículo hasta aspectos de seguridad, salud y medioambientales, aseguran que los futuros buzos comerciales, adquieran las habilidades requeridas y desarrollen el enfoque crítico necesario para enfrentar desafíos en entornos subacuáticos variados y a menudo impredecibles.
La formación certificada por las entidades que regulan este sector garantiza que los profesionales no solo sean competentes en su oficio, sino que también sean reconocidos internacionalmente, ampliando sus horizontes de empleo y desarrollo profesional.
El Instituto Gallego de Formación en Acuicultura (IGAFA), acreditado desde 2019 como Centro de Referencia Nacional en acuicultura y buceo, juega un papel crucial en la formación especializada en esta industria. IGAFA no solo ofrece programas educativos que cumplen con los estándares nacionales e internacionales, sino que también funciona como un polo de innovación y desarrollo, colaborando con sectores industriales y organizaciones para promover las mejores prácticas y la aplicación de las tecnologías más avanzadas.
Su reconocimiento como Centro de Referencia Nacional subraya su compromiso con la excelencia y su papel fundamental en la capacitación de profesionales altamente cualificados en el campo del buceo y la acuicultura.
En este sentido, el centro ha alcanzado recientemente un hito sin precedentes en el ámbito de la capacitación a buzos comerciales en España. La International Marine Contractors Association (IMCA), principal entidad mundial que establece normas y directrices para las operaciones de buceo en alta mar, ha reconocido la titulación de Técnico de Operaciones Subacuáticas e Hiperbáricas (TOSH) que imparte el centro.
Este logro sitúa a IGAFA en el mapa internacional de instituciones académicas que preparan a profesionales del buceo con los más altos estándares de seguridad y competencia técnica, a la vez que amplía el acceso a nuevas oportunidades laborales para sus estudiantes a nivel internacional.
Vicente Varela Parapar, Jefe del Departamento de Buceo, es una de las figuras clave en la parte docente de la institución. En esta entrevista, Varela aborda temas clave como las prácticas formativas, la colaboración con instituciones y empresas, y los retos que enfrenta la formación en buceo comercial en España.
P.- IGAFA está en el foco de la actualidad del buceo por el reciente reconocimiento de IMCA. Antes de entrar en este tema, nos gustaría preguntarle por el presente curso y que los lectores conozcan mejor el centro ¿Cómo está transcurriendo la temporada académica?
R.- Pues en este momento estamos en el segundo año del ciclo formativo, con alumnos que se prepararán para iniciar las prácticas de empresa el próximo mes de marzo. Estas prácticas son cruciales para que los estudiantes pongan en práctica lo aprendido a lo largo del curso.
Actualmente, estamos programando las prácticas de buceo con campana húmeda que realizaremos con Sasemar y Ardentia Marine, donde aprenderán el manejo de la campana húmeda, protocolos de emergencia y el manejo de trajes de agua caliente.
También, estamos gestionando la realización de prácticas en un embalse ubicado en la provincia de Ourense y programando visitas a la base de la Armada en Ferrol y a las instalaciones de Sasemar, que permiten a los alumnos conocer de cerca entornos profesionales reales.
“Procuramos que los alumnos se desenvuelvan en escenarios y situaciones reales, para que conozcan las adversidades que van a encontrar día a día”
¿Qué tipo de ejercicios realizan en estas prácticas?
Durante las prácticas de campana, los alumnos enfrentan simulaciones de situaciones críticas como pérdida de comunicaciones, suministro de aire, agua caliente o recuperación de un buzo accidentado.
En las prácticas que realizaremos en el embalse de Ourense los alumnos se enfrentarán a nuevas situaciones de buceo, como bucear en agua dulce y con poca visibilidad. Aquí aprovecharemos para realizar prácticas de búsqueda, recuperaciones y orientación, entre otras.
Estos escenarios preparan a los alumnos para condiciones adversas comunes en la profesión.

Estas prácticas fuera del centro son un complemento a la formación que se lleva a cabo en las instalaciones de IGAFA, donde los alumnos cuentan con espacios dotados con todo lo necesario para recibir una formación de calidad.
Así es. En nuestras instalaciones contamos con los medios necesarios para impartir los cursos ofreciendo garantías de calidad formativa para el alumnado. Además de todo el equipamiento necesario, incluida una cámara hiperbárica propia, tenemos una piscina de grandes dimensiones y un foso de buceo. El entorno donde se ubica el centro ofrece grandes posibilidades y hacemos inmersiones en la ría, donde contamos con una batea, un carro varadero y fácil acceso a un pequeño mercante hundido, de 80 metros de eslora, para simulaciones de trabajos reales.
En definitiva, todo esto está diseñado para cubrir un amplio espectro de situaciones que los futuros buzos enfrentarán una vez que comiencen su labor en las empresas del sector.

El apoyo institucional es clave para IGAFA ¿Qué apoyo recibe de las administraciones públicas?
IGAFA cuenta con un respaldo constante de la Dirección Xeral de Desenvolvemento Pesqueiro da Consellería do Mar, que se traduce un apoyo económico suficiente para poder para mantener una formación exigente en el centro.
Este apoyo permite mantener las instalaciones descritas, renovar equipos clave y adquirir tecnología avanzada, entre otras cuestiones. Además, la Consellería do Mar garantiza que los alumnos dispongan de condiciones óptimas durante las prácticas, como residencias cercanas a los lugares de formación.
Gracias a estos recursos, podemos ofrecer una experiencia educativa completa y moderna, adaptada a las necesidades del sector. Desde trajes de agua caliente hasta herramientas avanzadas para inspecciones subacuáticas, el equipamiento del centro asegura que los estudiantes estén al nivel de las demandas laborales actuales.
¿Cómo influye este apoyo en la calidad educativa del alumnado?
Gracias a estos recursos, podemos ofrecer una experiencia educativa completa y moderna, adaptada a las necesidades del sector. Desde trajes de agua caliente hasta herramientas avanzadas para inspecciones subacuáticas, el equipamiento del centro asegura que los estudiantes estén al nivel de las demandas laborales actuales.

¿Qué distingue a IGAFA en la formación?
Nuestro centro tiene ratios pequeños, con 12 alumnos por promoción. Esto nos permite personalizar la formación y realizar un seguimiento individualizado de cada estudiante.
Además, contamos con un proceso de selección riguroso que incluye pruebas físicas, psicotécnicas y de nota. Esto asegura que los candidatos seleccionados estén altamente motivados y preparados para enfrentar los desafíos de la profesión.
¿Cómo gestionan ustedes el absentismo?
Pues la verdad, que el absentismo en nuestro centro es muy bajo, pero contamos con un sistema de reservas para cubrir posibles abandonos durante el primer mes del curso.
La formación es exigente, y esto ayuda a que los estudiantes que permanecen se comprometan con el programa y completen su formación.
¿Cómo valoran los propios alumnos la formación en IGAFA?
Los alumnos destacan sobre todo el realismo de las prácticas, que van desde condiciones adversas en el mar hasta el manejo de todo tipo de herramientas (para corte y soldadura, neumáticas e hidráulicas o de inspección). Nuestro objetivo es que lleguen a las empresas con experiencia en un entorno que refleja fielmente la realidad laboral.
¿Qué mecanismos habilitan para facilitar la inserción laboral de los alumnos?
El 100 por cien de nuestros alumnos terminan trabajando en el sector. Las prácticas en empresas suelen ser el primer contacto, y muchos alumnos son contratados al concluirlas. También mantenemos una bolsa de trabajo activa y ofrecemos soporte continuo a los exalumnos.

La mujer cada vez tiene más presencia en el sector ¿se refleja esto en la demanda de plazas en el centro?
Hasta el momento, el número de alumnas que hemos tenido matriculadas es reducido. Pero, en este sentido, hay que poner en valor el excelente compromiso que demostraron durante su formación, destacando sobre todo sus capacidades de liderazgo y organización, que son aspectos fundamentales en esta profesión. Estas alumnas son un ejemplo de cómo la diversidad en el sector es fundamental para su desarrollo.
RECONOCIMIENTO IMCA Y FUTURO
¿Qué significa para IGAFA un reconocimiento de sus titulaciones por parte de IMCA?
El hecho de que la titulación que ofreces haya sido reconocida por una entidad tan relevante, abre un mundo de posibilidades a los alumnos y futuros buzos. A su vez, al tener que cumplir unos estándares docentes exigentes y contar con los importantes medios a nivel técnico, aumenta la calidad de nuestra formación.
El Departamento de Buceo del centro barajaba desde hace tiempo la posibilidad de que nuestra titulación de Técnico en Operaciones Subacuáticas e Hiperbáricas (TOSH) fuese reconocida por IMCA. Para lograrlo, tuvimos la suerte de contar con el apoyo de expertos de la industria en España, como Arturo Villazón Granda y Carlos Fernández Sixto, que nos han ayudado a agilizar este proceso. El reconocimiento de IMCA facilitará el acceso de los alumnos a empleos en importantes proyectos a nivel mundial y también a formaciones especializadas como, por ejemplo, el buceo en saturación.
Hace unos meses, Bill Chilton (Diving Manager de IMCA) y Ali Macleod (Technical Adviser de IMCA) visitaron el centro y pudieron comprobar nuestros procesos formativos, nuestras instalaciones y nuestras dotaciones de material. Durante su estancia en IGAFA, se llevaron muy buenas sensaciones sobre las infraestructuras, equipamiento y sobre el proceso de formación que llevamos a cabo.
El periodo de 2 años capacitación que reciben los alumnos les pareció algo muy positivo. Además, visitaron varios departamentos de la Administración autonómica de la cual depende el centro y han valorado bien el apoyo institucional al centro, para finalmente acreditar la titulación.

¿Cree que el reconocimiento atraerá el interés de un mayor número de aspirantes que quieran formarse en IGAFA?
Sin duda. Sobre todo crecerá el número de alumnos de otras comunidades autónomas españolas, para pasar las pruebas de selección y ocupar una de las 12 plazas que ofertamos cada dos años. No hay ninguna previsión de que el número de plazas crezca a corto plazo.
¿Qué consecuencias tendrá este reconocimiento para la formación de buceo en España?
El espíritu de esta iniciativa siempre ha sido lograr mejorar el sector y hacerlo desde la base, es decir, desde el periodo de formación de los buzos, creo que es el camino. A partir de ahora, lo interesante sería que otros centros puedan seguir los pasos de este Centro de Referencia Nacional de buceo y alcanzar este reconocimiento. En ese camino es importante que los centros que aspiren al reconocimiento del TOSH por IMCA, tenga un proceso formativo bien organizado y estructurado, de acuerdo con los estándares que avalúa la asociación.
En definitiva, hemos abierto el camino y tenemos la posibilidad de que España ocupe un lugar destacado en la capacitación de profesionales para la industria subacuática.
“El reconocimiento del TOSH abre también el camino a otros centros de formación en España que aspiren a obtener esta certificación y quieran adaptarse a los criterios de formación que exige IMCA para ello”
¿Cuáles son los principales retos para IGAFA en el futuro y cuáles son las principales necesidades del sector del buceo comercial?
Pues el gran reto para mejorar la formación, sigue siendo la unificación de los currículos a nivel nacional y garantizar estándares mínimos en la formación. En este sentido es importante encontrar un mayor apoyo de las administraciones para fomentar un diálogo entre las escuelas públicas.
No hay que olvidar que la formación Dual es una novedad importante en la formación de buceo comercial. Creo que este modelo beneficiará tanto a los alumnos como a las empresas, ya que podrán moldear a sus futuros trabajadores. En nuestro caso, la implementaremos en 2025-26 y durante el primer año las prácticas seguirán en el centro para garantizar la seguridad.
En cuanto al sector, es necesario mejorar las condiciones laborales, los coeficientes reductores y todo lo relacionado con la seguridad. El buceo comercial es una profesión exigente que debe ofrecer estabilidad y sueldos justos para atraer talento.